A favor de la ciudadanía y del servicio público Sindicaturas de Los Cabos y Tijuana se reúnen para unificar criterios de acción municipal

*Se pretende un Ayuntamiento evolutivo y organizado al nivel de municipios más desarrollados en temas de Administración Pública.

Los Cabos, B.C.S., 30 Mar.- Este 30 de marzo se realizó un encuentro en Palacio Municipal, entre la síndica de Los Cabos y el síndico procurador de Tijuana, con el objetivo de unificar criterios referentes a las atribuciones y funciones de las Sindicaturas y propiciar una evolución y organización en el destino al nivel de otras entidades estatales del país.

Cabe destacar que la ciudad de Tijuana trabaja bajo esquemas diferentes en cuanto a organización y ejecución de su competencia, por lo que en estos días se realizará una mesa de trabajo en la que se sumarán elementos procedentes del Ayuntamiento de Tijuana, donde expondrán el funcionamiento que realiza la Sindicatura Procuradora en su entidad, tales como el Programa de Sindicatura Turística, cuyo objetivo es el respaldo y vínculo del Gobierno con turistas víctimas de corrupción o abuso de autoridad, para que se respeten los derechos de visitante, así como hacer valer las sanciones correspondiente al acto indebido.

La actualización de las atribuciones y responsabilidades de Sindicatura Municipal en Los Cabos, está encaminada a unificar y adaptar criterios como órgano de control y normativo, como lo sería el cumplimiento esencial de un reglamento interno en el Ayuntamiento, revisando y supervisando el gasto de la cuenta pública, el buen funcionamiento de los servicios públicos, además del buen actuar de los servidores públicos de acuerdo al código de ética en el caso de acoso laboral y mala praxis de todos los elementos que conforman el Gobierno local.

Para finalizar, se informa que se tiene una buena relación entre ambos Gobiernos, los cuales están enfocados en sumarse en la lucha anticorrupción, por lo que se pretende implementar en Los Cabos estas prácticas exitosas en Tijuana y poder adaptar las buenas costumbres que permitirán tener un Ayuntamiento destacado, que beneficiará a la ciudadanía y a la propia Administración Pública, logrando un equilibrio y por ende, la atención y políticas públicas a favor de la población.